viernes, 27 de marzo de 2009

Consecuencias

Apenas un individuo entra en contacto con un caballo, sus pautas de relacionamiento se ven modificadas por completo. Personas con trastornos psicológicos, problemas de conducta y autoestima encuentran en el caballo un aliado especial con el cual ser tal cual son de forma auténtica, pues la tranquilidad que inspira este animal, sumada al hecho de que es un ser que no juzga, les permite a las personas actuar libremente con él.
Por supuesto que la Equinoterapia
no sólo se constriñe a la monta. El acompañar a los caballos mientras se alimentan, bañarlos, preparar la montura, acariciarlos, cepillarlos y otras actividades constituyen el espectro de opciones que brinda esta fabulosa terapia, lo cual la vuelve un tipo de terapia alternativa de lo más completa e integral.
Es así como personas que salen de prisión y necesitan rehabilitarse, adictos a las drogas, personas que sufren de autismo,
baja autoestima, agresividad, falta de afecto y muchos otros problemas, hallan en el caballo un aliado fundamental del cual aprender muchísimo para jugar una revancha como protagonistas activos de la sociedad.


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